Soñé cada día durante un año entero y, mediante ese sueño, la diosa Sylaveth me mostró lo que pasará con este mundo. El gran esquema de la diosa Sylaveth comenzará el día en que las estrellas, el sol, la luna y la tierra se alineen. Su voluntad para el final de todo es la promesa de un nuevo comienzo.

Cuando la luna roja brille en la noche más oscura, un hombre que quema su propia alma aparecerá. Él poseerá la espada del cielo y acogerá el corazón de un dragón, cabalgando sobre un caballo que despide humo rojo. En el momento en que coseche diez mil almas moradas, romperá el cascarón y volverá a nacer como un resplandeciente Caballero Carmesí de la Ruina. Guerra y la hambruna sin fin cubrirán el camino transitado por el Caballero de la Ruina tras abrir la Puerta de la Destrucción.

El final de todo es el comienzo de un nuevo mundo. Todos aquellos que deseen defender el mundo con su última voluntad morirán a manos del Caballero Carmesí de la Ruina. Los mensajeros de la diosa que invoque en la tierra acarrearán los Siete Grandes Desastres. Con esto, la sublime voluntad de la diosa Sylaveth se cumplirá.