Si estás leyendo esta carta, ya has experimentado mucho en mi salón.
Como habrás notado, las obras de este pasillo no son simplemente obras de arte. Son pasadizos que conectan este mundo con otros mundos, y también son puertas que solo aquellos con un Fragmento estelar pueden abrir. Descubrí la puerta por casualidad y vi un mundo hermoso que nunca había imaginado. Y esa misteriosa experiencia me fascinó profundamente.
A partir de entonces, busqué una por una las obras de arte mencionadas en leyendas y las recopilé en este Salón de ilusiones. Viajé libremente entre las pinturas y un sinnúmero de mundos.
Sin embargo, la alegría no duró mucho. Los mundos de las pinturas que habían estado completamente desconectados comenzaron a recibir la influencia de otros mundos. La razón de esto fue un invitado no deseado: yo. Mi irresponsable intervención alteró el equilibrio de los mundos.
Una vez que se rompió el equilibrio, los mundos de las pinturas se transformaron en un terrible caos. No podría manejarlo solo. Así que usé mi magia para enviar invitaciones a los trotamundos. Todos eran grandes trotamundos que tenían Fragmentos estelares. Igual que tú.
Quiero que tú y los demás trotamundos resuelvan los problemas de las pinturas. Si los arreglamos poco a poco, algún día volverá la paz y armonía al mundo.
Quizá yo sea una decepción para ti. Sin embargo, como director del Salón de ilusiones, protegeré este lugar hasta el final. Todavía hay muchas obras en el salón esperando tu atención. Por favor, no te alejes de esos hermosos mundos.
Te daré todo el apoyo que pueda.
Kailos, director del Salón de ilusiones.